En la constante búsqueda de preguntas, para después llegar a respuestas.

domingo, agosto 26, 2007

EL CHISTE DEL SEXO.

En el momento que logras reírte o sonreír con una desconocida, hay cientos de barreras que se caen y dan paso a otra cosa. Sucede con futuras amigas, gente en general, relaciones laborales, y, por supuesto, también con parejas.

Si la batita o el batito que te gusta te devuelve una sonrisa o ríe contigo, en general sabrás que ya tienes un trecho del camino recorrido.

Es que el sentido del humor lo es casi todo. Cuando me han preguntado como es mi mujer ideal, siempre he dicho: “que tenga sentido del humor”. No solo denota inteligencia sino que, además, yo quiero estar al lado de alguien que me haga reír. Alguien que también se ría de mis chistes por malos o simplones que resulten a veces, alguien que se ría conmigo.

Claro que, para tener un buen sentido del humor, hay que saber reírse, en primer lugar, de uno mismo. A veces siento que la gente se toma a si misma demasiado en serio, como si la vida en general fuera muy seria. No digo que no lo sea en muchos aspectos, pero si viviéramos riéndonos mas, estoy seguro de que nuestro transcurrir seria mucho mas agradable.

Pero vayamos al sexo, que al fin y al cabo siempre termino metiéndolo en mis posts (sorry, me traiciona el subconsciente jaja). El sexo es un evento que nos da placer, pero, ante todo, es un juego. Y si rescatamos nuestros mundos lúdicos (que todos llevamos dentro, algunos mas reprimidos que otros) el amor puede llegar a ser muy divertido.

Si intentamos copiar a los actores de las películas pornos, pues no, no solo no nos va a salir muy bien sino que, además, no va a ser gracioso. Pero si tenemos nuestra propia sexualidad y nuestro referente somos nosotros mismos, podemos tomar a broma las cosas más tremendas.

Por ejemplo, ¿a quien no le ha pasado que mientras esta en medio de un “chaca chaca” feroz y de repente se pierde el ritmo, por un microsegundo, y se sale el pene de la vagina? Estoy seguro que a todos. Y muchas veces cuando eso sucede hay gente que se “friquea”, que le da como rabia o vergüenza. ¡RELAX, NOS PASA A TODOS! Solo encuéntrale el lado gracioso. O cuando, después de hacer un cunnilingus o fellatio, según sea el caso, se nos queda atorado un vello púbico. Si ya se que suena muy guarro, pero ¡sucede todo el tiempo!. O peor, y no se como nombrar esto, pero a veces pasa que después de un buen rato de tanto “chaca chaca”, entra mucho aire a la vagina, y ese aire comienza a luchar por salir, y ¡sale haciendo unos soniditos! ¡DIOS MIÓ!. Parecen gases, pero no lo son, y la chava se muere de pena sin saber como diablos aclarar que aquello es vaginal, producto del “pum pum”, y no un gas ordinario que se nos escapo. Ya saben lo bochornoso que puede resultar eso, sobre todo si aun no hay demasiada confianza. Pero, que mejor en un caso así que aclarar que es y reírse hasta el cansancio.

Hay que sacar partido de los defectos o las situaciones que parecen adversas. Si una persona es particularmente tímida y lo confiesa en medio de una risa, puede ser muy excitante para el otro. No saber algo que te pide tu pareja también puede resultar gracioso. Susurrar una fantasía al oído, no solo puede excitarlos sino que puede ser muy divertido: “ahora tu eres una enfermera que entra a mi cuarto a atenderme y a medirme la temperatura, pero en realidad eres Scarlett Johansson, quien esta ensayando para un papel de enfermera…” jajaja, como verán, ya les conté una de mis fantasías. :$

Lograr que el otro se ría es, de por si, fantástico. Si además podemos mezclar placer y risa, ¿Qué mas queremos?.

lunes, agosto 13, 2007


MANHATTAN

Dice Woody Allen que lo que lo separa de los grandes maestros del cine es nunca haber hecho una obra maestra. Afirmación que carece de sentido al volver a ver esta genial comedia en la que conviven, a la perfección, la alegría de vivir y el pesimismo a ultranza. Una oda del director a sus máximos amores: Nueva York y Diane Keaton, que perdura por la resonancia de sus principales temas: la muerte y el amor.

domingo, agosto 12, 2007

CUERPO IMPRESIONANTE, CEREBRO OPCIONAL.

Ya lo sospechábamos pero aquí lo confirmamos. Ser “inteligentes” es un estorbo para las mujeres a la hora de conseguir pareja o marido. Esto puede resultar tremendamente chocante para los feministas y muy inquietante para los hombres.

Si no tuviera yo en la mano varios estudios llevados a cabo por importantes universidades europeas y estadounidenses, jamás me atrevería a decir lo siguiente, so pena de convertirme en carne de cañon de las feministas a ultranza. Se trata, desde luego, de una aseveración incomoda –quien sabe si aun mas para varones-, y se trata también de algo que intuitivamente muchos sospechábamos, pero que pocos nos atrevíamos a decir en voz alta. Lo expresaremos de una vez por todas: ellos las prefieren…. tontas.

Por si fuera poco, además de la oligofrenia hay una serie de características no mentales que hacen que una mujer resulte aun mas atractiva en las fantasías y, en ocasiones, hasta en las realidades masculinas, y estas son, a saber, las siguientes: senos relativamente grandes, cinturas breves, caderas anchas y un fenotipo exótico. Por razones que mucho tienen que ver con el instinto de apareamiento, como veremos a continuación, hay una marcada tendencia masculina a preferir a las “tontitas”.

Y antes de que alguien brinque me remito a las fuentes. La primera es un estudio llevado a cabo por la Universidad de Michigan en 2004, el cual fue, para colmo y sorpresa, conducido por una mujer, la psicóloga social Stephanie Brown. Las conclusiones del experimento son tan abruptas que no es necesario adornar el sablazo con eufemismos: los hombres tienen predilección por contraer matrimonio con mujeres que tienen puestos laborales inferiores a los suyos, y tienen a evitar a aquellas que ostentan cargos superiores. El estudio, publicado en la revista Evolution and Human Behavior, abre las puertas para las discusiones respecto de la utilidad evolutiva del rechazo de los hombres hacia las mujeres dominantes. En palabras llanas, y para explicar los hallazgos, ciertos antropólogos sostienen la hipótesis de que una mujer “Alfa”, es decir, dominante, tendría mas posibilidades de tener parejas múltiples y esto no resultaría prudente para la crianza de la prole.

“Estos hallazgos proporcionan la evidencia empírica necesaria para apoyar la creencia tan difundida de que las mujeres poderosas se encuentran en desventaja en el mercado amoroso, dado que los hombres prefieren emparejarse con mujeres menos exitosas.

Para quien opine que no se puede extraer una conclusión tan radical de un solo estudio, tengo a la mano otro estudio, esta vez más exhaustivo, el cual fue llevado a cabo por cuatro universidades de Gran Bretaña, concretamente las de Aberdeen, Bristol, Edimburgo y Glasgow. Esta vez, se utilizo una muestra aleatoria de 900 hombres y mujeres a quienes se les aplicaron test de coeficiente intelectual a los 11 anos y 40 años después se revisaron sus vidas.

Los académicos encontraron que las niñas con altos coeficientes intelectuales habían sido las que más problemas habían tenido par encontrar una pareja estable, al contrario de los niños, cuyo grado de inteligencia parecía haberles facilitado el conseguir pareja. Estos resultados concuerdan, desde luego, con las observaciones de los psicólogos clínicos, quienes notan informalmente en sus consultas que, para las mujeres con carreras exitosas, es difícil encontrar “hombres interesantes” que a su vez estén interesados en ellas.

Sin embargo, los ingleses son de lo más específicos cuando de hacer estadísticas se trata. Así, encontraron formalmente que para los niños hay un 35% de incremento en las probabilidades de tener una pareja estable por cada 16 puntos de incremento de su coeficiente intelectual, mientras que para las niñas es dramáticamente al revés: 40% menos probabilidades por cada incremento de 16 puntos de su coeficiente intelectual en la escala de Bidet.

Estos estudios pueden resultar a la vez un consuelo y una tremenda frustración para las mujeres.